Practicum I

lunes, 7 de diciembre de 2015

Semana V: del 30 de Noviembre al 4 de Diciembre

Esta primera semana de Diciembre ha sido bastante activa y he participado en varias actividades interesantes en las que he disfrutado mucho y me han servido para unirme aún más a mis alumnos.

El día 2 fui, junto con mis otras compañeras de prácticas a una excursión al parque de la Vega de Toledo con los alumnos de Educación Infantil, pues la profesora solicitó nuestra ayuda para que la salida tuviese lugar sin ningún tipo de incidente y con la máxima organización y orden y echasemos una mano a las profesoras de Infantil. La salida básicamente sirvió para que los niños viesen los efectos del Otoño por medio de las hojas caídas en el parque y las pudiesen coger y palpar. Una anécdota curiosa ha sido el descubrimiento de un loro en una fuente del parque pues no es muy corriente ver un loro exótico en medio de una ciudad como Toledo.

FOTOS DE LA SALIDA:



          


  Además, el día 3 fui testigo de la primera de las dos sesiones con recursos TIC en las que debía recoger todo tipo de información sobre la actuación del profesor, cómo utilizaba los recursos y todas las actividades que se llevaron a cabo y acontecimientos que ocurrieron. La clase fue de la asignatura de Lengua. Éste es otro ámbito que se nos requiere realizar durante estos meses de prácticas en la ficha de Prácticum TICE.

Es asombroso lo que ha cambiado la Educación en solo unos años y la gran rapidez con la que está evolucionando. En la actualidad, es muy complicado impartir clase sin la ayuda de los ordenadores y medios audiovisuales pues se presentan como recursos imprescindibles en la realización de las actividades y para la enseñanza de contenidos (principalmente en asignaturas como Inglés o Lengua).

Durante esta semana pude ver utilizar a los niños todos los recursos y materiales de Entusiasmat (cubos numéricos, reglas numéricas, calculadora, monedas falsas y un artilugio nuevo llevado por el profesor el jueves que consistía en una máquina de cartón pintada como si fuese metálica y con lucecitas como si fuese real y funcionaba de la siguiente manera: se metían diferentes fichas en una ranura y la máquina devolvía las fichas correspondientes a la operación (por ejemplo, si se van restando 2, si echas 3 monedas la máquina te devuelve 1)). Fue una metodología que les gustó mucho a los niños y con la que aprendieron muchísimo.

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